El nacimiento de la Biblioteca Municipal se remonta  a 1801 por obra del Departamento del Reno, concebida al principio para recoger el patrimonio bibliográfico de las congregaciones religiosas disueltas por las medidas del período napoleónico (1797-1798) y por el Reino de Italia (1866). Situada primero en el Convento de San Domenico, se trasladó en 1838 al palacio del Archiginnasio. Con el paso del tiempo muchísimas donaciones y adquisiciones enriquecieron el patrimonio de la biblioteca que se orientó cada vez más hacia las humanidades, prestando especial atención a todo lo que pertenecía a la vida civil, política y cultural de Bolonia y de su territorio. A lo largo de los años, el Archiginnasio se ha ido caracterizando cada vez más como una biblioteca de investigación y conservación, reforzando una vocación que se ha visto acentuada por el desarrollo paralelo de la Biblioteca Pública, fundada como una sección del Archiginnasio en 1909 y que posteriormente se convirtió en la Biblioteca Central de Lectura Pública. La Biblioteca promueve también numerosas iniciativas culturales como ciclos de convenciones, presentaciones de libros, conferencias, y exposiciones, así como una considerable actividad editorial.